por A orillas del lago Nahuel Huapi, una empresa familiar de productos gourmet, conservas vegetales y dulces crece a paso firme. Se trata de Valleverde, cuyo creador es Francisco Ponzinibbio, un ingeniero agrónomo de La Plata que a fines de los ´90 se radicó en el Sur para empezar una nueva vida. “A los 24 años me recibí de ingeniero agrónomo en la UNLP y me mudé a San Carlos de Bariloche donde alquilé un inmueble que tenía cámaras frigoríficas. Empecé a prestar servicio de mantenimiento de frío para almacenamiento de fruta congelada, truchas, pollos, maduración de bananas…”, cuenta.
Optar por Bariloche para emprender no fue casualidad. Su vacaciones de infancia eran en esa ciudad. “Me encanta la montaña y la naturaleza. Quizás extraño el verde de la pampa húmeda, pero no puedo sin mis montañas”, dice. “ Por otro lado, el hacer cosas me fascina. Podrían haber sido juguetes de madera, tornillos o cualquier otra cosa, pero elegí los alimentos porque creo que no hay gran cantidad de productos totalmente naturales y sanos. Somos lo que comemos y eso es clave”.
Quien lea en una etiqueta Valleverde va a encontrar productos naturales, sanos y en su proceso de elaboración somos respetuosos con el medio ambiente. “No son masivos ni económicos, pero son buenos” enfatiza su creador, quien tuvo que recorrer un duro camino para lograr comercializar seis lineas de productos gourmet que se distribuyen en todo el país y que cruzan las fronteras de los países limítrofes, y llegan a Venezuela, Inglaterra y Canadá.
“Me inicié en esto abocado a lograr la excelencia y con el afán de transmitir esos pequeños placeres que nos regala la vida. Comencé a pedir secretos en los almuerzos en la nieve, salidas de pesca, paseos por el bosque, noches en carpa con amigos…esa fue la fuente de mis recetas, recetas tradicionales donde cada uno aportaba su experiencia y las convertía en algo único”, expresa.
Ya sea en frasco de vidrio, en bolsa o lata con estuche de cartón, encontrás una variedad de productos: conservas vegetales, pastas, mostazas, dips, pesto, chimichurri, mezcla de especias, mezcla de vegetales, polentas y arroces listos para cocinar. También acetos y vinagres en envase PET con dosificador. Todos productos con materia prima federal, de El Bolsón, San Juan, valle de Río Negro, Mendoza y La Rioja, mayormente. Fieles a sus orígenes, sin aditivos ni conservantes.
Desde 2018, Valleverde también produce mermeladas y dulces con frutas naturales. A esta última apuesta le dieron nombre de Don Melitón. Encontrás Mermelada de Calafate, Rosa Mosqueta, o Arándanos. También dulces con combinaciones exquisitas como Dulce de Arándanos y Sauco con whisky, Dulce de Manzanas con Cerezas, Dulce de Frutillas con Merlot, Frambuesa y Cereza untable.
Después de años de lucha, hoy Ponzinibbio puede sentirse orgulloso de su lucha. “En Valleverde nos esforzamos cada día por acercar a las familias toda la frescura, calidad y pureza que la región de la Patagonia posee” dice el emprendedor y remata: “Es nuestra fantasía pensar que no hacemos alimentos, sino que fabricamos complementos que ayudan a que una reunión sea un momento especial, distendido y agradable entre amigos, en familia o también solos. Un gusto que uno se da”.
En La Plata podés encontrar los productos Valleverde en los siguientes lugares:
La Alicia (7 n° 1107)
Confitería La Española (Diag 73 esq 6)
Dietética Kbus (Diag 74 e/ 21 y 22)
Vinoteca Pequeño Terruno (17 y 39)
Dietética (Av 19 e/ 66 y 67)
Dulcineé (6 e/ 49 y 50)
Il Macelaio (Av 38 y 6)
Almacen el Molino (57 e/ 1 y 2)
Fiambrería Tandilia (8 e/ 42 y 43)
Fiambrería Don Hector (44 n° 2673)
Saona Fiambrería (Mitre 239, Ensenada)
Abrebocas (Cno. Centenario e/ 509 y 510)
Sa Cuina (Cantilo y 15 A, City Bell)
En Instagram: @valleverdepatagonia
