por 
Sandra y Claudio se conocieron en el trabajo. Ella, en atención al cliente; él, panadero de escuela. Se convirtieron en pareja y desde hace 6 años fundaron la panadería y pastelería Rico y Crocante en Barrio Jardín (117 e/ 84 y 85). Luego, desembarcaron en la esquina 12 y 44 con una propuesta más amplia para su clientela.
«Después que nos casamos nació la pana de 12, con otras características a la original porque ofrecemos cafetería en general, comidas, más todo lo referente a la pandería y pastelería. Claudio, mi marido, es un panadero de los antes, mientras que yo me divido entre abogada, pastelera y también de la decoración de los locales», relata Sandra en diálogo con TUCO.
«Trata de imprimirle un estilo romántico y rústico a la vez Los clientes dicen que da mucha paz sentarse a tomar un café, lo cual es muy reconfortante. Trato de trabajar todo el tiempo para ponerlos más lindos, ampliarlos», agrega.
En estos momentos, Rico y Crocante, además de su oferta habitual, cuenta con combos varios para cumpleaños, eventos, desayunos artesanales, de la mano de la incorporación de productos cada vez más demandados como línea sin TACC, veganos, integrales y elaborados con masa madre. Además, a la brevedad, adelantan que habrá una línea sorpresa para mascotas, dado que es un espacio petfriendly.
