Nescafé presentó su nueva línea de cafés fríos

En Argentina, el café es parte de la vida cotidiana: cada persona consume en promedio un kilogramo de café al año —equivalente a unas 208 tazas— y el 86,5 % de los hogares incorpora la categoría en su rutina. Aunque el 42 % de las ocasiones de consumo se concentra en el desayuno, el hábito se extiende a lo largo del día: un 24 % ocurre entre el almuerzo y la cena, un 12 % después de la cena y un 10 % durante el almuerzo. Estos datos reflejan que cada vez más momentos se convierten en una oportunidad para disfrutar de una taza de café.

En cuanto a formatos, el mercado se distribuye principalmente entre café tostado y molido (39 %) e instantáneo (37 %), mientras que el café en cápsulas y en grano comienzan a ganar espacio con un 8 % cada uno, anticipando una evolución en los hábitos de consumo.

Con esta diversidad de preferencias como punto de partida, Nestlé refuerza su estrategia de innovación y amplía su portafolio con nuevas propuestas que acompañan las tendencias más recientes. Entre ellas, el café frío emerge como protagonista: actualmente representa alrededor del 6 % de las ocasiones de consumo en Argentina, con potencial de duplicarse en los próximos años siguiendo la tendencia global.
Atenta a esta transformación, la compañía presenta dos grandes novedades. Por un lado, Nescafé Ice, el único café soluble 100 % puro que se prepara directamente en frío y permite disfrutar de una bebida de calidad superior, simple y refrescante, ideal para tomar solo o como base de recetas frías.

Por otro lado, la primera línea de café listo, disponible en versiones Cappuccino, Latte y Chococino, pensadas para el consumo on the go y para quienes buscan una alternativa práctica e indulgente para acompañar distintos momentos del día.
Dentro de esta tendencia, también están las cápsulas de Dolce Gusto en su variedad Frappé, para lograr una bebida fría y cremosa, inspirada en la deliciosa receta italiana del capuccino.