Armar una mas con la harina de maíz, agua, sal y aceite de oliva. Al no tener glúten, se va a desarmar fácilmente.
Forrar el molde antiadherente con esta masa, intentando que quede lo más finita posible.
Lavar y saltear las espinacas.
Lavar y poner en una olla con agua hirviendo las flores del brócoli. Blanquear unos 2 minutos y colar. Pasarlas en un bowl con agua fría para cortar su cocción.
Saltear las cebollas en aceite de oliva y dorar a fuego medio junto al ajo picado.
Agregar la espinaca cocida, bien picada. Manetener a fuego medio-bajo e ir revolviendo de a ratos para que no se pegue, hasta que veas que no quede nada de agua.
Agregar el brócoli y condimenta a tu gusto, incluso con el queso rallado.
Apagar el fuego y poner el relleno en un bowl.
Cuando se enfríe un poco, agregar los 2 huevos batidos (ahora se puede rectificar el condimento)y rellenar el molde.
Llevar a horno precalentado a 180ºc hasta que tu tarta esté completamente cocida.
Servir la tarta recién sacada del horno es ideal, y se la puede acompañar con alguna ensalada verde.