Quitar la parte verde del puerro y la raíz, lavar bien y secar.
En una sartén colocar una cucharada de manteca, agregar los puerros enteros y cocinar de ambos lados, una vez que tomaron algo de color agregar el azúcar y esperar que empiecen a caramelizar. Desglasar con vino blanco y agregar un poco de caldo de vegetales, dejar cocinar por 6 a 8 minutos y retirar.
Por otro lado, sobre una hornalla a fuego fuerte poner el morrón y quemarlo completamente, luego ponerlo en una bolsa o tuper cerrado para que el mismo vapor nos ayude a despegar mejor la cascara. Lavarlo bien bajo el agua y sacar cualquier resto de piel quemada.
En una sarté bien caliente poner la panceta que hicimos cortar de dos fetas gruesas y las doramos bien hasta que caramelice la grasa y quede crocante.
Filetear las supremas como si fuésemos a preparar una milanesa, colocarlas entre dos folex o papel film y golpear con un pisón o palote para que no queden demasiado gruesas.
Disponemos en una mesada el papel film y las supremas fileteadas tratando de formar un cuadrado de carne como si fuese un matambre abierto, salamos y le untamos la mostaza con el ajo picado y el queso rallado. Luego en el centro colocamos la panceta, el puerro confitado y el morrón asado. Arrollamos ayudándonos con el film y asegurándonos de que quede bien compacto. Enrollamos las puntas como si fuese un caramelo y con un hilo las atamos, también hacemos otros nudos cada 3 o 4 centímetros y de esta manera nos aseguramos que el relleno se contenga de mejor manera y no pierda la forma.
Cocinar a horno medio en una placa con un poco de caldo por unos 40 minutos, dejamos enfriar y cortamos en rodajas.
TIP: Se puede comer frío o caliente acompañado por ensaladas o en sándwich con aderezos.