por Es cocinera y una de las exponentes argentinas del foodstyling, una disciplina de la gastronomía que hace que la imagen de la comida represente su sabor, aroma y textura, y se vea tentadora. Ella es Pía Fendrik, y su trabajo abarca desde la selección y compra de los ingredientes especialmente seleccionados que se van a utilizar en la producción, hasta la creación del set en la mesa componiendo con las texturas, colores, vajillas y contrastes. Muchas veces incluye la creación de recetas. Además dicta cursos, escribe libros, y disfruta de hacer de cada plato una obra de arte. En una entrevista con TUCO, Pía nos cuenta detalles de su trabajo.
– ¿Cómo fue tu incursión en este oficio?
Fue por casualidad, yo trabajaba en la sección de decoración de la revista Para Ti, y la encargada del área de cocina se enfermo y tuve que cubrir una nota de cocina y al tiempo me encargaron la producción de unos fascículos de cocina y ahí me enamoré. Siempre me gustó cocinar pero antes era un hobby.
En el año 2005 me convocaron de la revista Sophia para hacerme cargo de la sección de cocina y allí empezó mi camino. Simultáneamente hice la carrera de pastelería en el IAG. Luego me fui capacitando en varias escuelas nacionales e internacionales.
Lo del foodstyling lo fui aprendiendo con el correr del tiempo. Fue algo bastante intuitivo, una cosa me fue llevando a la otra y terminé trabajando para grandes marcas haciendo publicidades y libros.
– ¿Ser food styling implica ser cocinera?
Si totalmente, no se puede hacer foodstyling si no se sabe cocinar.
– ¿Cuánto trabajo y dedicación hay detrás de una estilista gastronómica?
Mucho trabajo, largas horas de trabajo, somos los primeros que llegamos con un cargamento de productos y los últimos en irnos. Hay que ser muy prolija, meticulosa y detallista.
– ¿Cuál es la diferencia entre preparar ricos platos para que la familia y/o amigos disfruten y preparar algo destinado al foodstyling?
En el foodstyling el sabor no importa solo se prioriza la parte estética. No importa que el pollo esté crudo pero si se tiene que ver dorado y apetitoso por fuera. Es mejor que los espárragos estén casi crudos y crujientes antes que tiernos y ricos para comer. Nunca le ponemos sal a la comida que se va a fotografiar. Hay una gran diferencia entre cocinar para comer y para hacer una foto. Hay que pensar si la foto va a ser senital o frontal y de acuerdo a eso armar el plato, o que vajilla vamos a usar no es lo mismo un bowl que un plato plato. Hay muchas consideraciones al armar un plato para tomarle una foto.
– Hay una tendencia a dejar huellas de disfrute en las imágenes… el mordisco en la comida, el plato que quedó después del banquete… ¿qué opinás de estas escenas de “vida real”?
Me encanta que las fotos de cocina te hagan volar, que se despierte tu imaginación. De eso se trata, de crear una escena de disfrute y placer.
– Me imagino que para lograr algo bueno tiene que haber buena conexión con el fotógrafo… Ahora estás trabajando con Angela Copello ¿Cómo se reparten las tareas?
El trabajo en equipo es fundamental. Con Angela hacemos una excelente dupla, tenemos la misma estética y ya nos miramos y sabemos lo que estamos pensando, y frente a un cliente esto es fundamental.
Yo me ocupo de las recetas, el estilismo, la cocina y ella de la fotografía y el retoque. Las tareas están bien definidas. Para los proyectos propios, como los libros , el diseño lo hacemos en conjunto.
También trabajo con otros fotógrafos sobre todo para trabajo publicitario.
– ¿Tus libros sintetizan lo que es Pía Fendrik cocinera/estilista de alimentos?
Si totalmente, es el trabajo que mas disfruto y en el cual expreso todo lo que me gusta. Desde las recetas elegidas hasta la estética. El último libro de ensaladas es parte de mi vida.
– ¿Qué es lo que más te gusta de este trabajo?
Que la gente se anime a cocinar y entienda que no es difícil, que cocinar rico se puede , si hay amor y ganas de hacerlo. Amo que me manden mensajes diciendo que una de mis recetas ya forma parte de la tradición de sus casas o que le solucioné la vida con las recetas fáciles, o que ya no compran mas masa de tarta del super porque la que yo les enseñe es tan fácil que ahora no dudan en hacerla. Eso me alienta y me anima a seguir creando nuevas recetas.
– Por último, 3 consejos para tomar una linda foto gastronómica en casa
Siempre estar cerca de una ventana, usar luz natural.
Que la vajilla no compita con la comida.
Partir de lindos y buenos ingredientes.
Fotos: gentileza Pía Fendrik / Angela Copello
En IG: @piafendrikok
