por Bolas de fraile, pasta frola, palmeritas, alfajorcitos de Maicena… las piezas de bollería argentina son furor en Haarlem, la ciudad de los tulipanes, a sólo 15 minutos de Amsterdam, de la mano de una platense que recientemente sentó bases en el continente europeo.
Clara Moro tiene 31 años. En marzo de 2020 migró a Holanda junto a su pareja Gabriel Ignacio Alberola Sesma 33 años en búsqueda de aventura y de un futuro prometedor. La pandemia los sorprendió recién llegados a Europa y el confinamiento la llevó a descubrir un mundo en el que siempre había estado vinculada, pero que nunca había explorado: la cocina. Claro, su madre es la mismísima Claudia Romero, creadora de @amasa.madre, la cuenta de Instagram que cautiva a sus más de 280 mil seguidores con sus recetas de cocina.
«Hice la carrera de abogacía pero nunca me sentí llamada por la profesión, así que siempre me dediqué a cosas más creativas… y ahora descubrí el mundo pastelero, que me enamoró», comienza diciendo Clara en diálogo con TUCO.
– ¿Cómo empezaron con este proyecto?
Durante la pandemia me puse a cocinar mucho. Pasaba todas las tardes en la cocina, hasta que en un momento con mi novio nos dimos cuenta que estaba bastante bueno lo q hacíamos. Y ahí armamos el Instagram. Comenzamos vendiendo bolas de fraile con dulce de leche en Haarlem y nos empezaron a pedir de otras ciudades de Holanda. Así que mientras aprovechamos y mientras hacíamos entregas, viajábamos y conocíamos distintas ciudades.
– Y después fueron ampliando la propuesta…
Sí. Un día nos animamos a hacer medialunas. Yo tenía algo de día sobre el proceso de hojaldre por mi mamá, y pero jamás había hecho. Y bueno… nos empezamos a manijear con el mundo del hojaldre, que es hermoso, y ahora salen unas medialunas realmente muy muy ricas. Lo hacemos todo desde casa, con mucha pasión.
– ¿Qué es lo más difícil de hacer un producto argentino en otro país?
Lo que nos costó al principio fue encontrar la materia prima, el dulce de leche.. aún no entendemos cómo no lo venden en todos los supermercados del mundo.
– ¿ Quienes son tus mayores clientes? ¿Argentinos en Holanda?
Al principio la mayoría de nuestros clientes eran argentinos y latinos, pero poco a poco se van sumando los holandeses. Sobre todo con las cajitas de degustación, dónde hacemos una mix de pastelería e incluimos la tarta de manzana que acá es algo típico, entonces con eso los supimos enganchar.
– From Argentina Bakery es un proyecto de los dos… ¿Cómo se dividen las tareas con tu novio?
Ambos cocinamos todos los productos, pero si hay roles que cada uno fue eligiendo dentro de los procesos de elaboración. Fotos y redes me encargo yo. Las entregas las realiza Gabriel.
– Bolas de fraile, tortitas negras rellenas, palmeritas, alfajores, medialunas… ¿qué es lo que más llevan los holandeses?
Medialunas y alfajores a full. Y aman los alfajores, vale aclarar.
– Sin duda tu mami ha sido una inspiración en este proyecto, ¿aceptan sus sugerencias o consejos?
Amasa madre es nuestra asesora gastronomíca de cabecera. Siempre en contacto por videollamadas asesorandonos y evacuando dudas.
– ¿Cómo ven a From Argentina Bakery en unos años?
Ahora estamos con la tienda online, y en nuestras mejores proyecciones nos vemos abriendo un cafecito con pastelería argentina.
– Por último, ¿pensaste en llevarle a la reina Máxima tus preparaciones?
Aún no lo tenemos en la agenda, pero quizás alguna día
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